La Economía Social Solidaria también se vive en Senegal a través de un concepto ancestral que guía la manera en que las personas interactúan unas con otras. Es una idea que viene del Wolof, una de las 39 lenguas que alberga el país, utilizada como lingua franca y venida de la etnia con el mismo nombre que representa al 43% de la población total.
La Teranga hace hincapié en la generosidad de espíritu y en compartir en todos los encuentros, incluso con extrañxs; compartir el tiempo y disfrutarlo, sentir que la otra persona está contigo, en el mismo lugar: aquí y ahora. ”Teranga no es solo una palabra, es una estructura política, que transmite sentido y dinamismo, porque la vida evoluciona”, asevera Abdourahmane Seck, profesor de la Universidad Gaston Berger de Sant Louis, Senegal.
En la etimología de Teranga hay varias raíces dentro. A saber: “Ter, que es como aterrizar, después de un periplo, es llegar a tierra firme después de un largo camino, porque se utiliza especialmente en el ámbito de los pescadores, y nombra el encuentro que nos hace existir (antes del arribo no existimos); teu tiene que ver con esperar, pero no se trata de una espera pasiva sino de preparar el lugar y aclamar al que llega; teran transmite la idea de alcanzar el propio sentido, o la posibilidad de llegar a convertirse verdaderamente en uno mismo, o la plenitud del ser, y, por último, terang, que habla de recibir con cuidado, ocupándose del otro, porque el otro es alguien igual a uno”, según la expresión del antropólogo senegalés.
Este concepto se puede asemejar a la idea de la Pachamama ancestral latinoamericana o a los valores de respeto del Buen Vivir latinoamericanos trasladables a la solidaridad y la empatía que atraviesan todas las prácticas de la auténtica Economía Social Solidaria: la que pone a las personas y a nuestro entorno en el centro, la que aboga por un encuentro entre personas de carácter retroactivo y donde todas aprendemos unas de otras y de la naturaleza, guiadas por la generosidad, la hospitalidad, la calidad, la equidad y la igualdad.
En el día de África no podemos olvidar nuestros días en Dakar: la estancia en el hotel Oceanic, donde Ripess no solo alojó a la mayoría del equipo y celebró la Asamblea General de RAESS, sino que además nos trataron como si fuéramos parte de la familia. Tampoco olvidamos los buenos ratos conociendo y compartiendo día a día con las alianzas, WSM, INSP!R, WIEGO, con quienes no sólo aprendimos de su actividad y de sus valores, sino que además conocimos estupendas personas con las que tenemos ganas de compartir aún más camino solidario. Fue con ellas con quienes celebramos un Primero de mayo reivindicativo en el que conocimos las luchas de lxs trabajadorxs de Dakar, desde lxs recicladorxs, pasando por lxs trabajadorxs públicos, las cocineras y los abogados laboralistas de la sede de la CNTS.
Es la esperanza de la teranga que nos lleva a seguir trabajando por un mundo más solidario, donde nuestro trabajo y el de las personas en todos los continentes sea decente, respetado y respetable. Donde las personas se traten como iguales, porque el otro es igual uno y es de lxs demás de quienes aprendemos a ser mejores personas. Gracias, África.
En la foto: La red de mujeres transformadoras de Pout, que han realizado un trabajo enorme de solidaridad y de empoderamiento respetando los productos y las costumbres del lugar, reciben a Ripess y a las alianzas junto con el alcalde y autoridades de la zona. No solo ellas, la música, los leones senegaleses, lxs niñxs del pueblo y multitud de personas hicieron que ese, el primer día en Senegal para muchas, fuera inolvidable. Verdadero sentimiento Teranga.