La contribución de RIPESS a lo largo del camino hacia el éxito.
Yvon Poirier // 18 abril 2023
La adopción hoy por la Asamblea General de la ONU de la resolución A/RES/77/281 es un logro muy importante para nuestro movimiento, que ha estado promoviendo la ESS como un importante cambio de paradigma para ayudar a la humanidad a avanzar hacia un desarrollo verdaderamente sostenible que no deje a nadie atrás, el grito de guerra de Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Queremos agradecer y felicitar calurosamente a Alemania, Argentina, Armenia, Bélgica, Bulgaria, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Croacia, Dinamarca, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Luxemburgo, Malta, Marruecos, Mongolia, Portugal, República Checa, República Dominicana, Rumania y Senegal por copatrocinar esta resolución. Estamos especialmente agradecidxs a Chile, Senegal y España, apoyados por Francia, por preparar un borrador cero de la resolución y por organizar las negociaciones necesarias que dieron como resultado un borrador final sobre el que se alcanzó un consenso el 23 de marzo.
RIPESS lleva promoviendo la inclusión de la ESS en el desarrollo sostenible desde la Cumbre Mundial RIO+20 de junio de 2012. En aquel momento ya presentamos propuestas concretas para la inclusión de la ESS en los futuros ODS 2015-2030. Éramos conscientes de que los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) 2000-2015 no reducían significativamente la pobreza, y que muchos de los objetivos no se cumplirían.
Por eso participamos activamente en todos los foros en los que fue posible promover la ESS durante el periodo 2012-2014, porque sabíamos que los ODS 2015-2030 no se alcanzarían si se seguía actuando como hasta ahora. Participamos en las consultas de la sociedad civil que recomendaron el reconocimiento de la ESS. Participamos en el Foro Político de Alto Nivel (FPAN) de 2013 y 2014 en Nueva York. En el HLPF de 2014, nuestro entonces Secretario Ejecutivo, Daniel Tygel, fue el portavoz oficial de la sociedad civil, dirigiéndose a 130 delegaciones nacionales. También publicamos entonces una serie de recomendaciones que fueron respaldadas por 500 organizaciones de todo el mundo.
Aunque no conseguimos que la ESS se incluyera en la Agenda 2030, hemos sido implacables en nuestra búsqueda del reconocimiento internacional de la ESS. Nuestro colega de Mali, en África, Madani Coumaré, fue elegido orador de la sociedad civil para uno de los diálogos interactivos de la cumbre de la ONU que aprobó Transformar nuestro mundo en septiembre de 2015.
Nuestros miembros siguieron trabajando en sus respectivos países y continentes. A escala mundial, mantuvimos nuestro firme compromiso con el Grupo de Trabajo Interinstitucional de las Naciones Unidas sobre la ESS (UNTFSSE), creado en 2013. Seguimos participando en las academias anuales de ESS de la OIT. Organizamos (normalmente coorganizamos) talleres en muchas reuniones oficiales, como UNCTAD 14 en Nairobi en 2016, y ONU Hábitat III celebrada en México y la adopción de la Nueva Agenda Urbana en Quito en 2016. Las consultas de ONU Hábitat III brindaron la oportunidad de coorganizar talleres durante las consultas preparatorias en Montreal, Ciudad de México y Barcelona, junto con otras organizaciones de ESS. La ESS fue incluida en los informes de las tres reuniones. También firmamos conjuntamente con otras organizaciones de ESS: ESS FI, INAISE, GSEF, GFCD y Habitat International Coalition para proponer la inclusión de la ESS en la Nueva Agenda Urbana. Los meses de esfuerzos tuvieron éxito y la ESS fue incluida. Desde entonces, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución en diciembre de 2016 respaldando este texto. Esta es la primera resolución de la ONU que menciona la ESS.
El 7 de septiembre de 2016 fue el momento en que comenzó realmente el proceso hacia una resolución de la ONU. Aunque lo teníamos en mente, ese día un funcionario de la ONU nos transmitió un mensaje en el que sugería que era el momento adecuado para proponer una resolución sobre la ESS. Al darnos cuenta de que habíamos avanzado considerablemente en el reconocimiento internacional de la ESS, la idea se compartió con la UNTFSSE en las semanas y meses siguientes. Se continuó con la idea en algunas reuniones en 2017 y, finalmente, el 24 de febrero de 2018, el UNTFSSE adoptó una primera nota conceptual y aprobó la propuesta de avanzar en esta dirección. Ahora es un proyecto oficial. Las autoras de la primera nota conceptual, Chantal Line Carpentier y Fulvia Farinelli de la UNCTAD (miembro del UNTFSSE) acompañadas por el autor de este artículo, fueron invitadas a continuar el trabajo y preparar un primer borrador de la futura resolución. A principios de enero de 2019, basándose en el contenido proporcionado por este autor, Raymond Landveld dio forma al borrador para que tuviera un formato más propio de una resolución de la ONU. Este primer borrador se compartió y adoptó en la reunión del UNTFSSE del 26 de febrero de 2019. En mayo se adoptó un segundo borrador, con algunas modificaciones, a raíz de las sugerencias de miembros y observadores.
En ese momento, ningún país estaba dispuesto a patrocinar/proponer dicha resolución. Se decidió dejar en suspenso cualquier trabajo de mejora del proyecto de resolución, con la idea de que en una fecha posterior, cuando los países estuvieran de acuerdo en patrocinar la resolución, se reanudaría entonces el trabajo sobre el proyecto.
De mayo de 2019 a abril de 2022, la atención se centró en identificar un grupo de países dispuestos a patrocinar la resolución. Para ello, se elaboró un documento de posición en diferentes idiomas. Los miembros y observadores del UNTFSSE, incluida la RIPESS, han promovido la importancia de una resolución en muchos eventos internacionales como el Pacto por el Impacto en julio de 2019 en París, los eventos virtuales del HLPF, el GSEF 2021 en México y muchos otros. La pandemia de COVID-19 ha ralentizado considerablemente el proceso.
En marzo de 2021, el Consejo de Administración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) decidió que el tema de la discusión general de la 110ª Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) de junio de 2022 sería El trabajo decente y la economía social y solidaria. Dado que todos los países son miembros de la CIT, los documentos preparatorios, y el documento adoptado, sensibilizaron sobre la ESS. La definición de la ESS adoptada en esta ocasión se convirtió en la definición básica de la ESS en la Resolución. La OIT es el primer organismo de las Naciones Unidas que respalda formalmente la ESS. Los resultados de la CIT fueron un paso importante para convencer a más países de que apoyaran la Resolución de la ONU.
El gran avance se produjo a principios de 2022, cuando Francia y España organizaron una reunión en París los días 20 y 21 de abril para debatir la propuesta concreta de resolución. Se pidió entonces al UNTFSSE que preparara una versión actualizada del borrador, ya que habían pasado tres años desde la versión de mayo de 2019. El entonces presidente del UNTFSSE, Vic van Vuuren, pidió al equipo que había trabajado en este tema en el pasado, Raymond Landveld, Yvon Poirier (autor de este artículo) y Valentina Verze, de la OIT, que trabajaran colectivamente para actualizar el documento. La nueva versión se presentó en una reunión extraordinaria del UNTFSSE el 8 de abril.
La reunión, organizada por Francia, fue un éxito y los participantes decidieron proponer la resolución a la 77ª sesión de la Asamblea General de la ONU (de septiembre de 2022 a septiembre de 2023). Con motivo del HLPF 2022, la RIPESS y la UNTFSSE organizaron el 5 de julio un exitoso seminario web para promover la ESS, incluida la próxima resolución.
En 2022 se organizaron dos actos paralelos para promover el esfuerzo entre todas las misiones permanentes ante la ONU; el primero fue organizado por España el 22 de julio, y el segundo por Francia el 13 de diciembre. Como representante de la RIPESS, se me pidió que actuara como moderador en el acto del 22 de julio y como portavoz de la RIPESS en diciembre. Este proceso condujo al compromiso formal de 15-16 países miembros. Éstos designaron conjuntamente un equipo para dirigir el proceso. Chile, España y Senegal organizaron intercambios con el grupo de países y difundieron un borrador cero a partir del 1 de marzo. Posteriormente, este grupo de tres cofacilitadores organizó rondas de consultas sobre el borrador. Tras tres semanas de negociaciones, y después de varios cambios en el borrador, el proyecto de resolución se sometió a un proceso denominado «procedimiento de silencio». Una vez iniciado el procedimiento de silencio, los Estados miembros disponían de 48 horas para romper el silencio (manifestar su desacuerdo). Como el procedimiento del silencio no se rompió en la fecha límite del 23 de marzo, a las 5 de la tarde hora de Nueva York, la resolución se consideró validada para su adopción por consenso en la Asamblea General de la ONU. Este es el procedimiento habitual de la ONU. Una vez aprobada una resolución, los siguientes pasos son la traducción a las distintas lenguas de la ONU, la fijación de una fecha para el procedimiento de adopción, etc.
La adopción de la resolución es un paso muy importante para la ESS y sus actores, pero debemos seguir siendo modestos.
Los retos para incluir plenamente la ESS en todos los aspectos del desarrollo con el fin de alcanzar los ODS son enormes. Tendremos que desplegar el enfoque de la ESS allí donde aún es débil o incluso desconocido, y desarrollar su capacidad allí donde ya existe. Tendremos que reforzar las organizaciones y las redes. El reto financiero será enorme, ya que el sistema financiero mundial en el que vivimos hace todo lo posible para limitar la financiación al sector empresarial tradicional.
La ESS puede sacar a cientos de millones de personas de la pobreza absoluta. Los gobiernos deben adoptar una fiscalidad progresiva en los países «ricos y desarrollados». Incluso en estos países, la pobreza extrema está aumentando rápidamente debido a las múltiples crisis actuales. Deben abolirse los paraísos fiscales. Todos los países deben adoptar medidas globales de protección social. La ESS debe formar parte del esfuerzo por salir de la economía del carbono. Hay que reforzar las economías locales. La erradicación de la pobreza no es posible en un mundo en el que el 1% de la población acaparará cerca del 63% de la riqueza producida en 2021 y 2022. Necesitamos ver la ESS como un enfoque holístico que abarque todos los sectores de la vida económica, como es el caso de los ODS. Todo está interconectado.
Hay esperanza y optimismo.
La adopción de la resolución es el resultado del ecosistema de la ESS que hemos construido colectivamente a lo largo de varias décadas. Este ecosistema, formado por agencias de la ONU, el trabajo de la OCDE y la UNCTAD, UNTFSSE, organizaciones de ESS (RIPESS, GSEF y otras), Estados, organizaciones de investigación como CIRIEC y EMES, se ha desarrollado gradualmente. Sin este trabajo, una resolución de la ONU sobre la ESS sencillamente ¡NO HABRÍA SIDO POSIBLE!
Estamos convencidos de que la única manera de superar los enormes retos a los que seguiremos enfrentándonos es reforzar la cohesión y el enfoque ecosistémico de las últimas décadas. Quien viaja solo no llega lejos, pero juntos podemos dar grandes pasos sin dejar a nadie atrás.
RIPESS Intercontinental y sus miembros continentales están firmemente comprometidos con este enfoque. Ha formado parte de nuestra misión fundamental desde el principio.
La solidaridad es la clave.